Misión
CIRCULANDO POR LA DERECHA promueve y fomenta el conocimiento y desarrollo de los valores occidentales desenmascarando el relato progresista, apoyando y promoviendo los movimientos Pro Vida, Republicanos, Conservadores, Nacionalistas, Capitalistas, sirviendo de plataforma de encuentro y multiplicación de estos valores con la finalidad de permitir el desarrollo humano, obteniendo más y mejores ciudadanos para el futuro y que las generaciones del mañana deban luchar un poco menos respecto a sus antecesores contra las fuerzas del mal.
Visión
CIRCULANDO POR LA DERECHA es una “REVOLUCIÓN DE UNO SÓLO”. Es una plataforma para enlazar a todos los derechistas, en especial a los de habla hispana para ordenar, coordinar y canalizar los esfuerzos en la Batalla Cultural contra el Comunismo/Socialismo/Globalismo/Progresismo y cualquier otro disfraz que se coloque la izquierda para destruir la vida y los valores occidentales, defendiendo a los héroes de verdad.
Valores
1. Defensa de la vida desde la concepción hasta la muerte.
2. Promover y defender el derecho a la Legítima Defensa del ciudadano de bien.
3. Educar a la ciudadanía sobre la cultura occidental.
4. Promover la familia como la base de una sociedad sana.
5. Promover los principios republicanos como guía universal de las naciones.
6. Luchar intelectualmente contra las Tiranías.
7. Promover el capitalismo como el mejor sistema económico para el desarrollo humano.
COMO NOS DEFINIMOS
En CIRCULANDO POR LA DERECHA, tenemos una definición de los héroes la cual recatamos de un psicólogo español llamado Fabián C. Barrio, quien además es empresario y youtubero. Fabián tiene un estilo muy particular de ver las cosas y en muchos conceptos de la “vida” coincidimos con él. La definición de héroe que presenta Fabián C. Barrio me conmovió mucho la primera vez que vi su vídeo llamado Los Héroes. Acá les dejo el enlace para que puedan disfrutarlo y para que sepan ¿A qué nos referimos? Cuando en nuestros escritos hablemos sobre “Los Héroes de Verdad”. https://www.youtube.com/watch?v=qCSh-RrI4AE Espero lo disfruten y compartan esta definición del heroísmo, ese que se construye cada día, ese cuyo único propósito es que nuestros hijos, futuros héroes, deban luchar un poco menos contra las fuerzas del mal.
LOS HÉROES DE VERDAD.
“Los héroes de verdad se despiertan a las seis de la mañana, a las cinco, a las cuatro, a las siete. Arremeten el frío de la mañana como rompehielos con un café en el estómago y hacen esto todos los días, de lunes a viernes, sin quejarse. Viven la dictadura del despertador como lo más natural del mundo. Los héroes de verdad son capaces de pasarse una hora, dos, cruzando ciudades de punta a punta resolviendo sudokus para no enloquecer, mientras la vida les roe el corazón, para ir a un trabajo que detestan, porque su familia depende de ellos, los suyos dependen de que ellos se sacrifiquen desde el anonimato, de que regalen sus vidas enteras embutidos con otros héroes en cilindros de metal mientras la vida que viven aniquila toda esperanza de un mundo mejor. Los héroes de verdad soportan el olor a cebolla de los vagones del metro, los pasillos donde nunca se cuela la luz del sol, el chirrido insistente de las escaleras mecánicas pegajosas y las megafonías absurdas. Y el cuero de la piel no se les desgasta, los anillos no se les caen, sus ojos no se nublan, sus huesos no se quiebran, su alma no se rompe, siguen sonriendo a pesar de que están al final de la cadena trófica, a pesar de que lo saben. Día tras día, los héroes de verdad vencen la pereza, el desgaste, el desaliento, se ponen en pie y forman un ejército silencioso que libra la peor de las batallas contra el tedio, el hastío, la certeza de que nada irá mejor mañana. Los héroes de verdad se yerguen ante el infortunio para rescatar a quienes quieren, pero no lo hacen un día en un incendio, lo hacen a diario, tragándose el sapo de la vileza del mundo que les ha tocado vivir, y lo hacen sin rechistar y sin que se les dedique ni un misero segundo en las noticias. Los héroes de verdad son capaces de limpiar la mierda de otros, de cocinar para otros, de construir las casas donde vivirán otros son capaces de conducir a otros a hacer cosas más importantes de lo que ellos soñarán con hacer jamás. Los héroes de verdad barren suelos, cortan pelos, suturan heridas, desatascan tuberías, aran la tierra, sirven comidas, están horas enteras de pie sonriendo a mamones, reponen comida en las estanterías de los supermercados, les limpian el culo a los viejos, chupan pollas por 30 euros y follan por 40. Aguantan todos los días a gilipollas y más gilipollas, sin abrirles la cabeza con un bate de béisbol. Y mientras lo hacen, piensan en sus hijos y en sus mayores, y esa fuerza inexplicable consigue que sean capaces de hacer todo esto sin rechistar, sin rebelarse, sin un leve aliento de protesta. Día tras día, año a año, los héroes de verdad ponen el mismo tornillo, empaquetan los mismos regalos, pulsan las mismas teclas, recorren la misma carretera, atienden la misma llamada, le suenan los mismos mocos al mismo niño y limpian el mismo retrete y lo hacen poniendo el tornillo a una máquina que ellos no usarán, envolviendo regalos que no son para ellos, pulsando la tecla que no resolverá sus problemas, recorriendo la carretera de un país que no es el suyo, atendiendo llamadas de otros, sonando los mocos de hijos que no parieron. La propina se la lleva el cochero, pero fueron los caballos quienes tiraron del carruaje. Shah Jahan no construyó el Taj Mahal, fueron los héroes de verdad. Vespasiano no construyó el coliseo, fueron los héroes de verdad. Kefrén no construyó la esfinge, fueron los héroes de verdad. El batallón de esclavos sin rostro que llevaron aquellas piedras desde kilómetros de distancia bajo sus lomos cubiertos de costras y de sudor. Que murieron como moscas y hasta sus huesos permanecen en el olvido. Los verdaderos héroes saben que nadie recuerda sus rostros, saben que su tumba no será visitada dentro de 50 años y que sus huesos vencidos por la trituradora de la vida serán desalojados y volcados a una fosa común con los huesos de otros héroes, y nada de esto les importa, nada de esto les hace flaquear, porque la legión de verdaderos héroes hace todo lo que hace sin esperar nada a cambio. Cuando regresan a casa vencidos por la vida y sin fuerzas más que para arrastrarse a la cama unas pocas horas, habiendo sido sodomizados por la vida hasta desgarrarse el ano de su alma, nadie les hace una ola, nadie les da una medalla, nadie corea sus nombres y nadie emite sus proezas en la televisión. Sólo aspiran a asegurarse de que sus hijos, futuros héroes también, tengan que luchar un poquito menos de lo que lucharon ellos contra las fuerzas del mal.” https://www.youtube.com/watch?v=qCSh-RrI4AE TOMADO DE FABIÁN C. BARRIO.